Hacer cosméticos naturales es divertido, sencillo y muy barato
Hace un par de años participé en un taller para aprender a hacer cosméticos naturales. Aunque era una cosa que me apetecía desde hacía tiempo, nunca pensé que sería el principio de algo más que una afición. Descubrí que no sólo era sencillo y barato hacerlos en casa con productos razonablente fáciles de encontrar (¡a veces en mi propia cocina!), si no que era tremendamente divertido. Hoy os traigo una receta para hacer un exfoliante corporal totalmente natural, muy rápido y que deja la piel suavecita.Los cosméticos comerciales suelen estar fabricados con productos químicos que pueden ser agresivos para la piel. Para abaratar costes y conseguir que duren mucho tiempo sin estropearse en las estanterías de las tiendas, añaden conservantes y estabilizantes. Pero nosotros podemos preparar en menos de dos minutos nuestro propio exfoliante corporal con productos naturales y muy sencillos de conseguir.
El que hoy os enseño utiliza dos ingredientes básicos: azúcar moreno y aceite.
- 3 cucharas soperas de azúcar moreno o panela
- 3 cucharadas soperas de aceite
- Aceites esenciales
- Opcional: Cáscara de naranja, flores secas
Yo utilizo panela ecológica, que azúcar de caña sin refinar y es la que consumimos habitualmente en casa. Sus gránulos son los que eliminarán suavemente las células muertas de nuestra piel.
Al azúcar le añadimos aproximadamente la misma cantidad de aceite, el necesario para conseguir que una textura como de arena húmeda, pero que no quede demasiado líquido.
El aceite actuará como hidratante y permite extender el producto. Mi aceite preferido para este exfoliante es el de germen de trigo, muy rico en vitamina E y con un fuerte poder hidratante y antioxidante, lleno de ácidos Omega 3 y Omega 6. Pero podéis utilizar cualquier aceite siempre que sea de buena calidad y preferentemente ecológico (así evitaréis que tenga sustancias químicas). Me encanta el aceite de coco , y el aceite de oliva, y alguna vez también he usado aceite de aguacate y almendras, muy hidratantes.
Si queréis potenciar el efecto de vuestro exfoliante podéis añadir 10 gotas de vuestro aceite esencial preferido, teniendo en cuenta que sea siempre natural. Fijaos bien porque también existen esencias sintéticas, que no sólo no tienen las propiedades de los aceites esenciales, si no que pueden producir irritaciones. A mí me gusta utilizar aceite de naranja (estimula la formación de colágeno) o de limón.
A partir de aquí, os sugiero que utilicéis vuestra imaginación: podéis añadir al exfoliante hierbas aromáticas, como menta o lavanda, semillas de amapola para potenciar su efecto, pétalos de flores para que le aporten aroma y quede más bonito. ¡Con una buena presentación es un regalo perfecto! Sólo tenéis que tener la precaución de no hacerlo en cantidades demasiado grandes y si os sobra guardarlo en la never. Al no llevar ningún tipo de conservante, conviene no guardarlo demasiado tiempo.
Si os apetece aprender a hacer más cosméticos naturales, no dudéis en participar en los talleres que organizamos periódicamente. Además de pasar una mañana divertida, ¡descubriréis qué fácil es ahacerlos en casa!
¿Os animáis a probar?
Una idea genial!!
Una buena manera de volver a lo natural, aprender y descubrir que se pueden hacer productos para nosotras sin trampas…adelante!
Saludos
Pilar