“Si quieres ir rápido, ve solo. Si quieres llegar lejos, ve acompañado”
(Proverbio africano)
Cuando empiezas la aventura de montar una empresa, valoras la inversión, los medios con los que cuentas, las previsiones de ingresos, las horas que vas a echarle, los posibles beneficios económicos… Valoras si contigo mismo podrás sacarla adelante. Pero no contábamos con que por el camino, uno de los principales pilares de nuestro pequeño proyecto iban a ser los productores. Gente que sin apenas conocernos decidieron subirse a este barco con los ojos cerrados. Y es que ha sido una suerte encontrar estos compañeros de viaje.Puede que vieran en nosotros lo mismo que nosotros vimos en ellos: muchas ganas de cambiar las cosas, de demostrar que hay otras formas de vivir, de comer, de relacionarse con lo que nos rodea. Apostaron sin dudar por un proyecto que ni siquiera existía y nos animaron, aconsejaron y guiaron en el arranque.
Supongo que si se te acerca un día Gwyneth Paltrow y te propone colaborar con su nueva empresa de comida saludable es fácil decir que sí a la primera. Pero lo que tiene mérito es decir que sí cuando unos desconocidos llaman a tu puerta y te dicen “hola, tenemos un proyecto nuevo que todavía no tiene ni página web, y nos gustaría contar contigo para darle la vuelta a las relaciones entre los consumidores y productores. Te vamos a llenar ésto de gente que quiere saber cómo trabajas, por qué tus productos son especiales y de paso que les dejes participar”. Esperábamos un montón de noes. Pero recibimos muchos “cuenta conmigo”.
Como la bodega el Regajal y el huerto ecológico El Fresnedal, que nos abrieron las puertas para que hiciéramos las sesiones de fotos de la página web. O Antonio Simón, dispuesto a comprar mini trajes de apicultor para los niños que se animen a ver cómo fabrican miel las abejas en primera línea.
Queremos agradecerles que hayan confiado en nosotros y hayan contribuido a ampliar nuestros horizontes. Gracias por ejemplo a las chicas de Giraluna Cosmética Artesana, nuestras primeras colaboradoras que no se dedican a las cosas de comer. Con ellas nos dimos cuenta de que tan importante es lo que te echas a la boca como lo que te pones en el cuerpo cuando hablamos de salud y respeto al medio ambiente. Su proyecto tiene el espíritu Rural It como el que más.
Nos sentimos privilegiados por poderos ofrecer las fresas de Monjarama, la cerveza Goose o los frutos rojos de El Puente del Molino, productos gourmet que están en los mejores restaurantes y que ahora también pueden estar en vuestras casas. Y por poder ofreceros también el lujo de conocer oficios antiguos que se van perdiendo, como el de los obradores de El Horno de Lozoya y El Árbol del Pan, y lugares sorprendentes como la Huerta Clarita, Caracoles de la Vega o la Bodega Mariscalas, con auténticos artesanos del campo que miman sus productos hasta conseguir una calidad y un sabor únicos.
Os iremos contando muchas cosas de todos ellos, porque Rural It es mucho más que un sitio donde encontrar planes rurales interesantes. Queremos ser una verdadera comunidad donde productores y consumidores se relacionen de tú a tú de forma continuada. Que sepas qué pasa en la finca de tu productor favorito en las distintas épocas del año, o las novedades que quieren compartir. Pero hoy simplemente queríamos decirles…
¡GRACIAS!